miércoles, 18 de agosto de 2010

Lo bueno y lo malo.

Soy una persona muy activa en el tema de Internet, la gente que me sigue por Facebook y Twitter puede dar fe de ello, y me apasiona todo lo que ésta comunicación puede generar para las dos fuentes del diálogo. Es una comunicación directa y sin filtro, para bien y para mal, y todos estamos expuestos a toda clase de comentarios, en mi caso, gracias a Dios, han sido en su inmensa mayoría buenos y tengo un diálogo permanente y fluído con la gente que me acompaña en éste camino.

Hoy por Twitter (Escribo esto el martes 17 de agosto), vi circular un hashtag muy particular, era #cancionesquedeberíandesaparecer, y me encontré con muchas opiniones, y con que mucha gente que respeto como personas y profesionales participó dando su opinión acerca de las canciones que deberían desaparecer. Al final de cuentas eso está bien, de eso se trata esto y todo el mundo tiene la absoluta libertad, y está en su derecho de opinar y tener sus preferencias musicales, yo tengo las mías, pero siempre seré un defensor del debate constructivo en la música, siempre voy a proponer que hablemos de los tipos de artistas o tipos de canciones que quisiéramos que aparezcan, en lugar de destruír lo que hay. Debo confesar que no siempre pensé así, en alguna época vivía “tirando aceite” como decimos los músicos en Colombia cuando hacemos comentarios ácidos y negativos acerca de nuestros colegas.

Lo que captó mi atención en esa dinámica de #cancionesquedeberiandesaparecer, fue que mucha gente usaba las palabras “bueno” y “malo” para referirse a determinada canción, o a determinado artista, y me puse a pensar: ¿Quién tiene el medidor para decir algo así? ¿Dónde están los parámetros para lanzar semejante juicio?

La tecnología actual permite que haya mucha música en el mercado, para bien y para mal, he aprendido a pensar que sobre todo es para bien, y hay muchas maneras de decir mentiras en un disco, eso no lo voy a discutir, pero también creo que nadie tiene los parámetros para decir si algo es “bueno” o “malo”, porque creo que en el arte, y especialmente en la música, esos términos no tienen absolutamente ninguna cabida. Obvio que hay medidas estándares de afinación, tiempo y desempeño, que puede darle alguna objetividad a una apreciación, pero al final de cuentas, al juzgar una canción, o un artista, la objetividad queda en un segundo plano. El arte siempre será subjetivo.

En el arte algo te gusta o no te gusta, algo te dice algo o no te genera nada, algo es cercano para ti o no le encuentras nada que te llame la atención, pero creo que no podemos ser tan arrogantes y déspotas de decir, por lo menos en el arte y específicamente en la música, ésta canción es mala, o éste artista es bueno, porque seguro que esa canción significa algo para alguien, y ese artista es referente de alguien.

Creo que buscar lo que nos separa en lugar de tratar de encontrar el lugar común es lo que nos tiene complicados como industria, y me voy un poco más allá, nos tiene complicados como país. Países de industrias mucho más desarrolladas, como España y Brasil, donde he tenido la fortuna de trabajar, me han enseñado eso.

El trabajo de cada uno de nosotros los músicos, creo que debe ser hacer obras de las que nos sintamos orgullosos, esperando que le gusten a alguien, y como he sufrido en carne propia cada disco que he hecho, cada vez me siento con menos libertad de juzgar el trabajo del otro, busco lo que me gusta y me agarro de ahí, creo que es una buena idea.

La opinión propia es un derecho, los gustos son individuales, es la manera de expresar esa opinión la que determina si estamos en plan de destrucción o construyendo algo importante con la mùsica nacional. Yo por mi parte digo: #pongaleplay a los artistas nacionales, a l@s q le gusten, a l@s que le lleguen al alma, a l@s que quiera, pero #pongaleplay que la mùsica es para oírla y sentirla.

jueves, 15 de abril de 2010

¡CONCURSO PARA ACOMPAÑAR A SANTIAGO EN EL EVENTO 40!




“CUANDO REGRESES”

A QUIEN EXTRAÑAS…

PARTICIPA EN EL CONCURSO DESDE CUALQUIER CIUDAD SELECCIONADA DE COLOMBIA Y CONOCE A SANTIAGO CRUZ.

Este año Santiago Cruz es uno de los grandes artistas nacionales invitado a participar en el Evento 40 que se realizará en Bogotá el próximo 24 de Abril. Alrededor de este concierto en donde Santiago estará con su banda completa, el artista ha querido premiar a sus fans por el incondicional apoyo que han tenido durante todo este tiempo, realizando un concurso nacional para poder tener la representación de algunos de sus seguidores en Bogotá.

MECANICA DEL CONCURSO- “Ingresa a la página www.los40.com.co para participar en el concurso, manda tu foto con el nombre de la persona que más extrañas a 40principales@caracol.com.co. Se escogerán 10 ganadores y los más originales se traerán a la ciudad de Bogotá por Aero República y se alojarán en el Hotel Holiday Inn Express.

Los escogidos pasarán el día como invitados especiales de Santiago con todos los gastos pagos. Este concurso también incluye la ciudad de Bogotá de donde se escogerán 10 ganadores, todos estarán compartiendo con el artista un almuerzo, fotos, su CD autografiado y posteriormente un bus los estará llevando al Evento 40 para estar en primera fila cada uno con su boleta VIP.

En la noche las fotos ganadoras se podrán ver en un video que se presentará en el concierto y harán parte de la canción más exitosa de este momento “Cuando Regreses”. Para el artista, sus fans son lo más importante y es un homenaje que Santiago Cruz hace a su público que siempre lo ha apoyado en su carrera.

A partir de esta semana se pueden obtener entradas para el Evento 40 comprando el CD de la edición limitada de CRUCE DE CAMINOS, el nuevo disco de Santiago Cruz con los éxitos ¨Baja la Guardia¨ y ¨Cuando Regreses¨, en Tango de la 92 con 15, Tower Records y Almacenes La Música del Centro Comercial Andino y/ Prodiscos de Unicentro en Bogotá.



viernes, 15 de enero de 2010

LA SORPRESA Y LA RECETA

Espero nunca perder la capacidad de sorprenderme, nunca dar las cosas por sentado. Todo lo que ha pasado durante el 2009 con “Baja la guardia” ha sido una sorpresa para mi, y una sorpresa que he disfrutado muchísimo. Obviamente yo quería que me fuera bien, yo quería que el disco encontrara oídos en algunas personas, yo quería que las canciones encontraran terreno fértil donde crecer en algunos corazones, pero la verdad he recibido más de lo que esperaba.

Si alguien me hubiera dicho en mayo del año pasado, días antes de lanzar a radio el 1º sencillo de ésta aventura llamada “Cruce de Caminos”, que iba a ser una canción que iba a sonar durante 8 meses en radio, que iba a ser número 1 en casi todas las ciudades de Colombia, y que el video iba a tener más 1´500.000 views en youtube, realmente no lo hubiera creído, es más, aún me cuesta un poco creerlo.

Que hace falta para que un proyecto musical sea exitoso? Esa es la pregunta del millón, la que todo el mundo en ésta industria se hace, y la realidad es que no hay respuesta, si tuviéramos un manual para hacer éxitos pues todos lo aplicaríamos, y todos seríamos mega-estrellas. Aunque pensándolo bien debería dividir un poco el asunto en la música, es decir, para hacer cierto tipo de éxitos si hay un manual, y de tanto en tanto la industria lo demuestra, pero para los que hacemos otro tipo de cosas, no digo mejores ni peores, sino diferentes, muy propias, no hay manual. Y hay algunos que preferimos estar orgullosos de lo que hacemos antes de ser mega-estrellas, el precio a veces es muy alto.

Que hizo que “Cruce de caminos” esté teniendo el desarrollo tan maravilloso que ha tenido durante el 2009, y éste comienzo de 2010? No podría dar un veredicto concreto, creo que son una cantidad de factores que se unieron. Voy a tratar de enumerarlos, para tratar de entender lo que ha pasado, y sobre todo disfrutarlo.

1- Tuve un proceso de redescubrimiento personal, de reconstrucción del Santiago que yo se que siempre he sido, y que durante algún tiempo estuvo refundido bajo una pila inmensa de ropa sucia. Tuve que acabar conmigo mismo, en todos los sentidos, para volver a edificarme sobre lo más básico. Ahí tendría que mencionar a toda mi familia, a mis grandes y verdaderos amigos, y a un amor que me sanó. Como mis discos, para bien y para mal son un fiel reflejo de mi momento personal, pues estaba la mesa servida para un banquete.

2- Apareció en mi vida mi amiga, cómplice, socia, y firme creyente, mi manager Mariana Zuloaga. El Coliseo Romano en tiempos de gladiadores se hubiera rendido a los pies de ésta mujer. Me levantó en los peores días y me dijo la cosa más valiosa que le pueden decir a alguien que hace música: “Yo creo en ti”. Junto a ella apreció toda su familia, y se volvieron la red para los que nos atrevimos a caminar la cuerda floja con una sombrilla en una mano.

3- Llegué, por atrevido, en una historia que ya he contado muchas veces, a la puerta del señor Nacho Mañó, uno de los más grandes músicos de hispanoamérica. Allí encontré antes que nada a un amigo, luego a un maestro, encontré a alguien que hablaba mi mismo idioma con respecto a la música, encontré una brújula y un faro para navegar tranquilo. Nacho entendió todo desde el comienzo.

4- Aparecieron varios ángeles de la guarda, mencionados en los agradecimientos del disco, quienes dijeron: “Vamos con toda por ese sueño”.

5- Llegamos a la casa donde debíamos llegar, llegamos a Sony Music. En cabeza del señor Andrés López ésta major tiene un sabor especial, y de ahí para abajo la gente maneja una mística diferente, e hicieron de “Cruce de caminos” su proyecto personal. Sony era el terreno donde la semilla de éste álbum podía germinar cono lo está haciendo, pero no por el nombre de la compañía, sino por los nombres de cada una de las personas que componen el equipo de trabajo.

6- La gente de la radio que creyó desde el principio en la canción, y los que se sumaron después, a los que “convertimos”.

7- Y lo más importante, ustedes, la gente, que estaba con el corazón abierto para decir “Si es preciso te recuerdo que no fue mi intención…” Sintieron de verdad un disco hecho de verdad. No hubo trucos, y eso lo sintieron ustedes, y lo agradecieron volviendo suya mi canción.

Ahora se viene “Cuando regreses”, y espero seguir sorprendiéndome como hasta ahora lo he hecho. He cantado muchas veces “Baja la guardia”, en diferentes auditorios y frente a públicos diferentes, y me siguen temblando las piernas de la emoción, la última vez y la que tengo más fresca fue en Manizales, en la fiesta del “Club Manizales”, inolvidable!

Sigamos en éste camino, y sobre todo, disfrutemos del paisaje, que está maravilloso! Sigo creyendo en la magia, y en la energía como fuente de todo.

Gracias por un 2009 que atesoraré por siempre, y los invito a éste 2010, en el que vamos a alucinar juntos.

SC

lunes, 11 de enero de 2010

eltiempo.com / cultura y ocio / música Los artistas de exportación (puestos 9 al 20) en La Pirámide del Estrellato

"La balada que le dio a Cruz una mejor imagen como arista estaba pegajosa, pero tiene mejores canciones por promover en ese álbum, quiero que suenen en el 2010", Liliana Martínez Polo.

"Tuvo un hermoso resurgir, su producción fue impecable, de ahí la gran acogida", Diva Jesurum

"Para mí, publicó el mejor álbum pop del año en Colombia. 'Cruce de caminos', su tercer trabajo discográfico le permitió ganar credibilidad, demostrar que lo suyo en la música no es un pasatiempo o capricho, sino una pasión, una profesión. 'Baja la guardia', es una de las canciones del año, pero en el 2010, si es adecuadamente manejado, el público descubrirá verdaderas joyas del pop en este álbum. Debe ser el momento de su internacionalización", Sergio Villamizar.

"Es un batallador de la música que lo ha intentado por todos los medios. Se fue por la línea romántica comercial en su disco con un sonido muy bien diseñado y producido por Nacho Mañó que se encontró en Myspace. Santiago creo que ya tiene identificado su público", Andrés Nieto Molina.

"No recuerdo qué cantaba Santiago Cruz antes de que publicara 'Cruce de caminos'. Es un álbum muy bien hecho, con el que merece ser conocido afuera. Con seguridad es una producción que va a marcar el antes y después de su carrera", Liliana Ramírez.